martes, 2 de enero de 2007

Mal fin de año

Oscuro año el 2006….y sobretodo su final.

A nivel nacional, ETA se encargó de acabar por si sola la pantomima que ella propiamente creó con el denominado “alto el fuego” buscando, como siempre engañar a gente que de buena voluntad desea su final y desarme. El atentado de Barajas reafirma, por si lo dudábamos, la calaña que son y serán. Han tirado ellos solitos las escasas esperanzas que existía en el denominado y fracasado “proceso de paz”. Tal vez el mundo político no ha estado a la altura de las circunstancias (ni gobierno ni oposición) pero ellos y solo ellos son los únicos responsables de que 2 inocentes hayan muerto este sábado y de hacer fracasar la pantomima que ellos anunciaron.
A nivel internacional, la muerte de Saddam. No por la muerte del dictador, ególatra, genocida, etc. (eso no lo lamenta nadie) sino porque Bush y el débil gobierno iraquí con ello solo crean un nuevo “mártir” para el mundo extremista islámico y sobretodo para sus partidarios suníes en Irak. Cierto es que para el gobierno iraquí tener a Saddam vivito y en una celda iraquí era una losa muy grande pero muerto puede ser peor ya que con su muerte no arreglan nada…”ha muerto el rey, ¡viva el rey!” . Por desgracia, no tardará en salir un nuevo líder que dirija el descontento reinante en un país donde al norte los kurdos desean su independencia, el centro sunní y el sur shiita son antagónicos y donde solo la presencia de tropas aliadas permite que sobreviva un gobierno falso y artificial. Solo s cuestión de tiempo para que, por desgracia, esa situación desencadene (si ya no lo es) en una guerra civil para que suba a poder un nuevo tirano, sea sunní, shiita o cristiano.
A nivel social, que os voy a contar (al fin y al cabo es lo que más notamos…); la subida de las hipotecas, el precio del autobús, el tren, tabaco, gasolina…en fin alegrías.

En fin, sabor amargo este fin de año. Tan solo desear que se transforme en dulce en el presente 2007.

FELIZ AÑO NUEVO!!! Y a esperar que el fin del 2006 no sea el prólogo del nuevo año sino el capítulo final del pasado año.